Gasto y financiamiento constituye una unidad con muchos elementos interrelacionados, que ciertamente para efectos de su estudio debe ser analizada desagregando sus diversos componentes: por una parte, el gasto, y por la otra, el financiamiento, pero en el entendimiento de que no se trata de fragmentos separados, sino de las dos caras de una misma moneda.
El gasto implica presupuestar, es decir, plantear la realización o el mantenimiento de una obra o servicio, y calcular el costo de hacerlo, y una vez establecido, decidir como va a cubrirse, por que los ingresos públicos deben provenir principalmente de la recaudación de impuestos, que por numerosos que sean no son cargas establecidas caprichosamente, si no que constituyen un sistema que grava el flujo de los ingresos de los contribuyentes: su percepción, gasto o acumulación, que corresponden a los impuestos al ingreso, al consumo y a la riqueza respectivamente, siendo el endeudamiento complemento no sustituto de lo recaudado a través del sistema impositivo. Se integra así el sistema fiscal, que incluye tanto el ingreso derivado de la recaudación y de los empréstitos, como al gasto público.