Este libro está pensado para recordar a quien es reconocido como el más grande penalista de finales del siglo XIX y principios del XX. Es un reconocimiento al profesor investigador que impulsó el desarrollo de lo que hoy se conoce como la dogmática jurídico penal moderna, es decir, el quehacer científico: la ciencia del derecho penal.
Después de Franz von LISZT, sin duda, el saber del derecho penal, sin retrocesos, mantiene su carácter científico vinculado a la realidad que presenta la conformación de las sociedades de hoy, y si en algunas instituciones jurídicas solía verse el llamado retorno de Franz von LISZT, éste no es el mismo, porque su elaboración es con conocimiento de sus ideas.
En resumidas cuentas, como el fin en el derecho penal, creemos que la figura y las ideas de Franz von LISZT, al menos para nosotros, no tendrán final, porque no nos tocará presenciarlo.