Este segundo volumen sobre la criminalización de la protesta social está destinado a continuar con la reflexión iniciada en el primer volumen. Se presenta un análisis jurídico y sociológico donde se evidencia el uso y el abuso del Derecho frente a la protesta social: la individualización estratégica de la conducta colectiva para desmovilizar la organización social, la interpretación de los actos de protesta bajo el uso manipulado y discrecional de las figuras jurídicas penales.
El libro incluye una reflexión acerca de las tareas que tienen que cumplir los abogados en esta época de represión: el uso alternativo del Derecho. Lo cual significa que los juristas democráticos tendrán que defender a los reprimidos, haciendo uso de las herramientas que el propio Derecho -hegemónico y dominante- proporciona. Así, dos tareas se abren: el estudio de la criminalización de la protesta -que no es un fenómeno ni nuevo ni solamente mexicano y la defensa de los criminalizados. Sobre ambas trata este libro.
