"Constantemente citadas, apenas leídas: éste es el sino habitual de las contribuciones clásicas en economía. Lombard Street, de Walter Bagehot no es una excepción. Bagehot ha alcanzado la categoría de icono y es ampliamente reconocido como el autor que, ya en 1873, estableció los principios que orientarían hasta el presente las funciones de prestamista de última instancia de los bancos centrales [
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Los lectores de habla hispana no deben dejar pasar la oportunidad que brinda esta nueva edición para conocer de primera mano lo que realmente dijo Bagehot, en lugar de limitarse a beber de fuentes secundarias. De hacerlo, no se arrepentirán [
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La característica distintiva de una obra de calidad es que inspire un rico repertorio de ideas sobre el pasado, el presente y el futuro. Con arreglo a este criterio, el texto de Bagehot merece ser considerado como un clásico. Se puede estar o no de acuerdo con él, pero no se puede dejar pasar la ocasión de afrontar directamente sus argumentos. Estoy seguro de que disfrutarán con su lectura".