Me permito muy especialmente recomendar al lector esta obra, particularmente a quienes deseen conocer las modernas orientaciones del Derecho Societario y concretamente algunas instituciones específicas de las muchas que la obra abarca. No lo hacemos sólo respecto de los hombres del Derecho en Uruguay -para quienes cualquier recomendación es obvia y quizá sobreabundante- sino también a los argentinos (dado que la obra se publica en este país), a los latinoamericanos y a los de otras culturas jurídicas. En cuanto a los argentinos, en especial, porque el común origen de nuestros pueblos y nuestras culturas, aunado a la similitud de nuestras legislaciones, hace que este libro pueda ser perfectamente utilizado en el conocimiento, la interpretación y la aplicación del Derecho Societario vernáculo. Bastará ver las numerosas referencias al Derecho argentino y a la literatura jurídica que lo trata para advertir la absoluta funcionalidad del desarrollo argumental y soluciones al Derecho nacional.
Y en algunos casos de particularismos, en campos en que ellos aparecen naturalmente (por ejemplo, los tratamientos fiscales), es claro que ciertas normas pueden ser diferentes en su expresión, pero brotan de ellas problemas similares que sirven de necesario cotejo. Concluyo esta parcela destacando que, como experto en Derecho del Mercosur, OLIVERA GARCÍA seguramente apunta a reforzar los ideales de mayor compenetración y armonización de nuestras culturas, en particular en lo que hace a la legislación.