Las Notas para el estudio de la auditoría legal que Alberto Saíd da ahora a las prensas del INDEPAC, me llevan a realizar distintas observaciones:
La necesidad de la cultura de la revisión de las conductas ajenas desde tiempos muy remotos es un anhelo ético que no siempre ha tenido su correspondencia en las estructuras jurídicas, las políticas e incluso en las sociales. Es muy natural el rechazo a las actividades verificadoras por el sujeto auditado pero ante su inevitable realización, es menester efectuarlas con un sentido técnico y moral.
En lo que se llama el inmenso campo de la prueba social, una y otra vez realizamos y nos realizan constataciones y verificaciones. El ser humano requiere constatar una amplia gama de aspectos en su diario vivir. El segundo campo o la segunda circunferencia probatoria es más estrecha pues se conforma de las constataciones jurídicas. Pienso que a él corresponde la actividad técnica de verificación denominada auditoría legal, pues en esencia verifica y confirma conductas jurídicas a través de distintos métodos y por el empleo de técnicas y rudimentos (existe también el círculo de la prueba en los procesos judiciales que no explico por salirse del tema principal).
El estudio de Alberto Saíd es breve pero da los primeros pasos para alcanzar una teoría general de la auditoría legal. El autor no trata en cuestionarios de auditoría procesal a los distintos procesos, vías impugnativas, incidentes y ejecuciones de las diversas ramas de enjuiciamiento; labor que es deseable realice en futuras tareas académicas, y así nos presente una visión más amplia de la auditoría legal procesal.