La testimonial es el medio de prueba más utilizado en el proceso. En los sistemas acusatorios y adversariales, la actividad de fiscales y defensores cobra mayor protagonismo porque los testigos son de las partes. Ofrecer, examinar y contraexaminar, valorar e impugnar están bajo su responsabilidad. La formación profesional ha desatendido el desarrollo de tácticas, herramientas, técnicas y conocimientos útiles para cumplir eficazmente con esos momentos de la actividad probatoria, fenómeno relacionado, en parte, con la cultura inquisitiva que subsiste.
Cuestiones como la teoría o presentación del caso, preparación de testigos, el orden de su presentación, protocolos, consejos y métodos para interrogar y contrainterrogar, uso de preguntas sugestivas, sistema de objeciones, muchas veces resultan extrañas a la costumbre forense local. Lo complementan otros aspectos no menos importantes: la incorporación al juicio de declaraciones anteriores, métodos para ayudar a la memoria, análisis gestual y lingüístico, pautas de valoración y estrategias.
La temática, de por sí útil y enriquecedora para cualquier tipo de proceso, es abordada con referencias y análisis de los nuevos sistemas de enjuiciamiento en especial el Código Procesal Penal Federal, lo que potencia el carácter necesario y actual de esta obra.